
Debajo de mi piel está mi persona, mi libertad. La piel que habito es una impactante película de Pedro Almodóvar que una vez más no deja indiferente a nadie. Tanto es así que después de verla, continúa el interés y se quiere uno acercar a leer Tarántula, de Thierry Jonquet, que es la novela en la que se basa la película. La película invita a reflexionar sobre la libertad humana, la bioética, las pasiones, la enfermedad mental... en fin, sobre la existencia en sí misma. A su vez la interpretación de los actores resulta excepcional, así como también la cantidad de planos cortos que se encuentran y que la hacen una película realmente desconcertante.